El perfume se construye alrededor de una enorme dosis de sándalo natural de Mysore elegido por sus aromas cálidos y exóticos. La vainilla y el bálsamo del Perú sugieren una evocación de la pastelería flamenca. El absoluto de jazmín aporta comodidad, suavidad y encanto y un cóctel de almizcles. El pachulí aporta una vibración coriácea que hace que la fragancia sea aún más seductora, una vez que lo pruebes ya no podrás prescindir de él. Bálsamo del Perú - Jazmín - Sándalo - Vainilla - Almizcle - Pachulí - Azafrán. Si el ingenioso olfato de Frederic Malle imaginó una creación donde se pudiera reflejar el estilo de Dries Van Noten, la mano de Bruno Jovanovic (nariz de IFF) compuso la fórmula del jugo clasificado como un amaderado oriental cremoso suave y discreto, un detalle sugerido por el mismo Dries Van Noten hace unos años cuando expresó su idea personal del perfume. “El olfato es importante. Me encanta el aroma pero en el momento en que huele de lejos ya no me gusta. El perfume debe ser discreto”, declaró en aquella ocasión Dries Van Noten, visión que Jovanovic interpretó a través de una pirámide olfativa construida. «Con la colección XXX de Frédéric Malle pretendo traducir en notas olfativas el mundo y el espíritu de marcas o personas que admiro y respeto. El primero estará dedicado a Dries Van Noten», dice el editor de perfumes del mismo nombre. Limón - Bergamota de Calabria Jazmín egipcio Azafrán absoluto - Nuez moscada - Pachulí Sándalo de Mysore - Sacrazol Vanigia - Bálsamo de Perú - Almizcles blancos